El interruptor táctil permite encender la iluminación LED con un tocar de dedo. El botón tiene 1,5 cm de ancho y tiene un estilo sutil, gracias a ello se lo puede poner en cualquier lugar en la superficie del espejo. Se lo instala en una armadura hermética en la parte trasera del espejo, en el lugar que antes ha sido sometido al arenado.
El interruptor táctil tiene una iluminación LED especial, gracias a ello podemos fácilmente localizarlo sin ninguna iluminación adicional. El color de iluminación cambia según el modo de actividad – mientras funcione es de color azul y en el caso contrario es verde.
La iluminación donde se usa tal interruptor se apaga automáticamente después de 30 minutos. Por eso dicha opción se recomienda a los espejos instalados en los cuartos de estar y en las habitaciones de hotel. En caso de los espejos que tienen estera de calefacción será imprescindible instalar un interruptor adicional para manejarla.